lunes, 7 de abril de 2014

Seda roja y encaje

 
Me compré en las rebajas un precioso conjunto de ropa interior. Rojo e indecentemente caro, espero que el 70% de descuento sobre su precio original no se aplique también a su efectividad erótico-sensual. Lo adquirí porque me lo merecía y lo guardé en su celofán original a la espera del momento adecuado para presentarlo en sociedad. A veces hago pequeñas locuras de ese tipo que luego olvido por completo y que vuelven a ver la luz en mis famosas “limpiezas de armarios”. Aquel día, iba acompañada de una amiga que estaba de visita en nuestra ciudad quien también se sintió tentada –era imposible sustraerse a la promesa de excitación de la seda y la suavidad de los encajes-, aunque ella –más clasiquita que yo en lides amatorias- eligió el color champagne.

Durante el mes de Enero y todo Febrero hemos hecho chistes telefónicos semanales y apuestas entre carcajadas para ver quién de las dos lo estrena antes; bien entendido que la “inauguración” de esos doscientos gramos de emoción pasional debía reunir –como mínimo- unos requisitos nada rutinarios, extraordinarios más bien. Y como un día con otro –ella casada, yo single- el celofán seguía sin arrugarse, decidimos la semana pasada que había que proveer a nuestro pequeño tesoro de la coletilla que dice: “consumir preferentemente antes de... fecha indicada en la etiqueta de la braga”. Y convinimos el 21 de Marzo por aquello del tópico de la primavera.

Entre risas y ahogos varios hemos seguido charlando –mi amiga y yo- de la inoportunidad de estrenar –por su parte- el conjunto erótico-festivo con un marido sietemesino (es decir, que sólo lo hace cada siete meses o así porque está ya muy mayor (el marido, no mi amiga) y ha decidido ponérselo debajo de la servilleta en la cena del próximo sábado a ver qué pasa. No porque sea el día del padre sino porque su marido se llama algo que empieza por Josenosécuantos.

Servidora, fiel cumplidora de cualquier promesa o compromiso a que me lleve la amistad, se enfrenta a una duda existencial que tengo que dilucidar el próximo fin de semana: ¿el color rojo pega con las torrijas?

En fin.
http://blogs.diariovasco.com/apartirdelos50

LaAlquimista
Por si alguien desea contactar:
apartirdeloscincuenta@gmail.com

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